viernes, 18 de abril de 2014

CRUZ VICTORIOSA




EL ÁRBOLDE LA CRUZ
Hoy celebramos el día de la Cruz victoriosa, desde donde Jesús nos dejó lo mejor de Él mismo: María como madre, el perdón —también de sus verdugos— y la confianza total en Dios Padre.
Hagamos silencio en nuestro corazón…Miremos, acojamos al Crucificado y adorémoslo.

Contemplación:
 El “Invisible” se ha hecho carne de nuestra carne, y ha asumido el ser hombre hasta la muerte y una muerte de cruz, muerte que nos da vida.  
Hemos conocido en Jesús, lo que es el amor:
«Nadie tiene mayor amor que el de dar la vida por sus amigos» (Jn 15,13).

“Él nos ha hecho pasar de la esclavitud a la libertad, de las tinieblas a la luz, de la muerte a la vida. Él es nuestra salvación”.

                                                 ¿Y nosotros/as?


¿Mi testimonio es liberador; ayuda a otros pasar de las tinieblas a la luz; de la muerte a la vida?

¿He aprendido a mirar en el rostro sufriente de los demás el rostro del Señor?