¿Has pensado o meditado que el cuidado de la naturaleza es un llamado , una vocación…  y  que es según el Génesis, el primer llamado que recibimos de Dios y que nos convierte  en cocredores con Él. Si permanecemos indiferentes  al cuidado de la naturaleza  o si no respondo a ese llamado, estoy ignorando mi vocación primigenia.
Con conciencia ecológica podemos reconvertir una triste realidad, como lo es la actual contaminación y destrucción del planeta , en nueva vida más amable y fraterna,  gozando desde ya  de la Restauración de todas las cosas en Cristo , como lo dice San Pablo.
 
