jueves, 10 de noviembre de 2016

JUSTICIA y MISERICORDIA




MISERICORDIA INFINITA, JUSTICIA PERFECTA 


La Sagrada Escritura nos presenta a Dios como misericordia infinita, pero también como justicia perfecta. ¿Cómo conciliar las dos cosas? ¿Cómo se articula la realidad de la misericordia con las exigencias de la justicia? Podría parecer que sean dos realidades que se contradicen; en realidad no es así, porque es justamente la misericordia de Dios que lleva a cumplimiento la verdadera justicia.  ¿Pero, de qué justicia se trata?

Se trata de un procedimiento que evita recurrir a un tribunal y prevé que la víctima se dirija directamente al culpable para invitarlo a la conversión, ayudándolo a entender que está haciendo el mal, apelándose a su conciencia. En este modo, finalmente arrepentido y reconociendo su proprio error, él puede abrirse al perdón que la parte agraviada le está ofreciendo. El corazón se abre al perdón que le es ofrecido. Es este el modo de resolver los contrastes al interno de las comunidades y familias, en las relaciones entre esposos o entre padres e hijos, donde el ofendido ama al culpable y desea salvar la relación que lo une al otro".  (Papa Francisco enh su catequesis de los miércoles)


      "El reino de Dios es Gracia antes que juicio: Dios es una buena noticia antes que una amenaza. Cuando se sientan rechazados por la sociedad, sepan que Dios los abraza." 
 (tomado de José Antonio Pagola  en su libro “Jesús”)