EL ÁRBOLDE LA CRUZ
Hoy
celebramos el día de la Cruz victoriosa, desde donde Jesús nos dejó lo mejor de
Él mismo: María como madre, el perdón —también de sus verdugos— y la confianza
total en Dios Padre.
Hagamos
silencio en nuestro corazón…Miremos, acojamos al Crucificado y adorémoslo. 
Contemplación:
Contemplación:
 El “Invisible” se ha hecho carne de nuestra
carne, y ha asumido el ser hombre hasta la muerte y una muerte de cruz, muerte
que nos da vida.  
Hemos conocido en Jesús, lo que es el amor: 
«Nadie tiene mayor amor que el de dar la vida
por sus amigos» (Jn 15,13). 
“Él nos ha hecho pasar de la esclavitud a la
libertad, de las tinieblas a la luz, de la muerte a la vida. Él es nuestra
salvación”.
                                                 ¿Y nosotros/as?
¿He aprendido a mirar en el rostro sufriente de los demás el rostro del Señor?
 


